En el ‘Día Internacional de la Niña’, que se conmemora el próximo domingo 11 de octubre, por cuarto año consecutivo, con el propósito de visibilizar la situación de las niñas, promover sus derechos y eliminar las brechas de género que aún persisten, Fundación Plan realizó diferentes eventos. Uno de estos fue un conversatorio con sus aliados y con niñas de Bolívar, Sucre, Nariño, Chocó, Cauca, Valle del Cauca y Cundinamarca, quienes viajaron hasta Bogotá para reunirse ayer en la Sede de la Dirección General del Instituto de Bienestar Familiar-ICBF. También se conectaron durante el evento, vía streaming, niñas del Atlántico y el Pacífico quienes participaron del conversatorio y compartieron sus mensajes de paz.

Durante el evento representantes de Fundación Plan, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, UNICEF, ONU MUJERES, UNFPA y la Alianza por la Niñez compartieron con las niñas el trabajo que vienen realizando por la niñez y la igualdad de género. Igualmente hicieron un llamado para promover el cumplimiento del quinto Objetivo de Desarrollo Sostenible, que hace referencia a la eliminación de cualquier forma de discriminación contra las mujeres y las niñas. Este objetivo hace parte de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible aprobados recientemente por las Naciones Unidas.

Actualmente, Colombia se encuentra en un momento de transición y el desafío de implementar estos objetivos  y su correspondiente Agenda 2030 llega en el momento en el que el país ve la posibilidad de un acuerdo de paz con la guerrilla de las FARC-EP y un futuro cercano de post-acuerdos que permita la terminación de un conflicto interno de más de 50 años. Es entonces una oportunidad para reflexionar sobre el rol específico de las niñas en la construcción de la paz e incluirlas en el proceso.

Algunas reflexiones 

Para Gabriela Bucher Balcázar, presidenta ejecutiva de la Fundación Plan, “más allá del acuerdo que se firme entre las partes del conflicto, lo cual esperamos se haga realidad pronto, la paz se logra entre todos. Si queremos que la paz sea sostenible será vital que consideremos e incluyamos a las niñas, los niños y la juventud del país, quienes con su capacidad y entusiasmo como agentes de cambio, son los llamados a contribuir a las transformaciones que les permitirán vivir en un país que responda a sus ideales. Una de estas grandes transformaciones será que los roles tradicionales masculinos y femeninos, que se exacerban con la violencia armada, se puedan replantear para que haya una nueva forma de relacionamiento basada en el respeto y la aceptación de las diferencias”.

Cristina Plazas Michelsen, directora general del ICBF, comentó que “el Estado colombiano ha reconocido la importancia de las mujeres en la construcción y sostenibilidad del país, por ello tenemos claro que todo lo que hagamos para garantizar los proyectos de vida de nuestras niñas, nos permite no solo asegurar un futuro pleno para ellas, sino impactar de forma positiva en el desarrollo del país y en nuestra anhelada paz. Claramente, la discriminación hacia las niñas, y en general hacia las mujeres, es una realidad de tiempo atrás que se ha perpetuado en el tiempo a través de prácticas culturales como el machismo en las que se ve y se trata a la mujer en una posición inferior a la del hombre, limitando entonces sus oportunidades de progreso en iguales condiciones a las de los hombres. Los derechos de niñas y niños prevalecen por igual y eso es algo que nuestra sociedad debe comprender y practicar. Nuestras niñas deben ejercer plenamente sus derechos, educarse, hacer sentir su voz, ser protegidas y respetadas, solo tratándolas en igualdad de condiciones podremos concretar ese sueño que todos tenemos por una paz justa y duradera”.

Asimismo, Viviana Limpias, representante adjunta UNICEF Colombia, agregó que “si las niñas reciben apoyo eficaz durante la infancia y adolescencia, tienen la posibilidad de cambiar el mundo. Toda inversión destinada a otorgar ese poder a las niñas respalda la vigencia actual de sus derechos y constituye una promesa de un futuro más equitativo y próspero. En Colombia nos enfrentamos al reto de la construcción de la paz y a realizar inversiones suficientes para dar respuesta adecuada a los desafíos que enfrentan las niñas”.

Por su parte, Jorge Parra Vergara, representante del Fondo de Población de las Naciones Unidas –UNFPA, dijo que “el principal desafío para una construcción de paz estable y duradera es superar las inequidades entre las niñas, dada la desigualdad de oportunidades que ellas viven en dependencia de su nivel de riqueza, su nivel educativo, su zona de residencia, su pertenencia étnica, su condición o no de discapacidad. Cada niña debe poder transitar hacia la adultez de manera sana, feliz y en condiciones de bienestar.  Igualmente trabajar en alianza con otras organizaciones, para que las niñas tengan oportunidades de realizar sus sueños y crecer libres de violencia y así participar como ciudadanas activas en la construcción de la paz”.

Flor María Díaz, oficial nacional del programa ONU Mujeres, afirmó que “ONU MUJERES entiende que la paz se construye también impulsando el desarrollo de las mujeres desde la niñez, y por eso apoya procesos de transformación cultural y se hacen esfuerzos para reforzar a la institucionalidad. Trabajamos teniendo en cuenta como foco poblacional a las niñas, adolescentes y mujeres. Trabajamos por la transformación de la cultura sexista que niega y sigue negando un lugar a las mujeres desde su temprana infancia”.

Finalmente, Adriana Espinosa, secretaria ejecutiva de Alianza por la Niñez Colombiana, comentó que “en el proceso de construcción de paz es importante la participación de todos porque implica transformar las relaciones entre los seres humanos y las relaciones sociales de manera que lleguemos a un consenso de inclusión y reconocimiento de cada sujeto de derecho. Es muy importante que dentro de ese marco participen las mujeres y las niñas, porque las mayores discriminaciones recaen en la categoría de mujeres. Desde la Alianza por la Niñez trabajamos para posicionar en el Estado y en la sociedad el reconocimiento, el respecto y la garantía de los derechos de los niños y las niñas, y en ese proceso de reconocimiento y garantía hacemos mucho énfasis en el reconocimiento de las diferencias de género y en la eliminación de las discriminaciones hacia las niñas y las mujeres”.

Para cerrar el encuentro, las niñas compartieron con los asistentes sus mensajes de paz y esperanza, para recordar que aunque hay avances en el tema es importante seguir trabajando por la igualdad, la inclusión y eliminación de todo tipo de violencia contra las niñas y las mujeres.

Los mensajes de paz de las niñas

“Las niñas, adolescentes y jóvenes con nuestras ideas podemos aportar a la transformación de nuestra realidad”, Paola.

“Llegará el día en que dejen de mirarnos por encima del hombro”, Blanca.

“Llegará el día en que ya no nos dirán ustedes no pueden”, Belkys.

“Llegará el día en que nos miren de frente y nos digan ¡Lo lograron!”, Heylin.

“Dejaremos nuestro pasado y transformaremos nuestro presente, porque somos valiosas y merecemos respeto”, Laura Vanessa.

“La paz es una realidad, todas y todos debemos cultivarla”, Carolina.

“No nos rindamos, si unimos nuestras voces serán escuchadas”, María Alejandra.

“Te invitamos a que camines junto a nosotras, y que entre todas y todos construyamos un mundo mejor, un mundo con igualdad”, Laura F.

“Contémosle al mundo que el cambio es ahora”, Leonela.